La vejez comienza cada vez más tarde, especialmente según los afectados. Un estudio publicado por la Asociación Americana de Psicología señala que los adultos de mediana y avanzada edad creen que la vejez ahora empieza más tarde de lo que sus coetáneos señalaban hace décadas, e incluso más tarde de lo que ellos mismos decían en ese entonces. Ser viejo ya no es lo que solía ser. Este estudio no solo refleja cambios biológicos, sino también sugiere mucho sobre la forma en que nos relacionamos con el proceso de envejecimiento. Markus Wettstein, psicólogo de la Universidad de Humboldt en Berlín y autor principal del estudio, explica que existe una tendencia histórica sólida hacia un inicio subjetivo más tardío de la vejez, aunque aún no se comprende completamente el motivo.
En los últimos años, la esperanza de vida y la calidad de vida han aumentado. Esto ha ido acompañado de cambios en la sociedad, como el aplazamiento de etapas vitales como la emancipación, el matrimonio o la maternidad, y también la jubilación, que es la puerta oficial de entrada a la tercera edad en muchos países. Es posible que el concepto difuso de “anciano” se haya alejado unos años debido a estos cambios, sugieren los investigadores. Además, en una sociedad que valora la juventud, es probable que nadie quiera percibirse a sí mismo como un anciano.
¿Qué significa exactamente ser anciano? La respuesta es compleja, ya que el grupo de adultos mayores es tremendamente heterogéneo. Las mujeres tienden a situar la vejez más lejos que los hombres, con una diferencia promedio de 2.4 años entre ambos géneros. En general, los encuestados mencionaron los 70 y 71 años como la edad más comúnmente asociada con la vejez. Sin embargo, definir con precisión cuándo comienza la vejez sigue siendo un desafío debido a esta diversidad. Wettstein no se ve capaz de refrendar esos números. “Es difícil definirlo porque siempre vemos en nuestras investigaciones lo tremendamente heterogéneo que es el grupo de los adultos mayores”,
En resumen, la percepción del inicio de la vejez ha cambiado, y la sociedad actual se relaciona de manera diferente con el envejecimiento. Aunque aún no se comprende completamente el motivo detrás de este cambio, es evidente que la vejez ya no es lo que solía ser.
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